Barcelona, España, 13 oct (Prensa Latina) El mediocampista Sergi Roberto asume la actual temporada como su última en el FC Barcelona, según reseñan hoy diversos medios catalanes tras la cita sostenida por el jugador y el portugués Deco, director deportivo del club.
El polivalente jugador y primer capitán culé accedió al encuentro con Deco antes del parón actual para partidos de selecciones, en el cual abordaron la actuación del equipo y los jugadores en la presente campaña, pero también su situación personal, recoge el diario Mundo Deportivo.
Fuentes cercanas al club destacan que a Sergi Roberto se le tiene muy alta consideración por lo que representa para la plantilla, para los técnicos y por su inmaculado comportamiento profesional, siempre en bajo perfil, pero entregado con total compromiso a los colores blaugranas.
Este año apenas ha jugado 224 minutos repartidos en seis partidos y en los que ha marcado un gol, este en el último juego de Liga ante el Granada, cuando el canterano anotó el segundo gol, válido para igualar el marcador a escasos minutos del final y que permitió al once culé mantener su invito en la temporada.
Tal situación y rol asumido por el futbolista, inclina a expertos y seguidores culés a constatar que Sergi Roberto está asumiendo paulatinamente que su futuro estaría lejos de volver a jugar en el Camp Nou, estadio emblema barcelonés inmersos en obras de renovación capital.
Los medios locales coinciden en que durante el encuentro entre jugador y director deportivo no se abordó su contrato, que expira el 30 de junio de 2024, y todo indica que está descartada su renovación.
Para las demarcaciones que habitualmente desempeña Sergi Roberto, el equipo técnico que encabeza Xavi Hernández contempla buscar un lateral derecho que complemente al luso Joao Cancelo, cedido por el Manchester City, pero a quien esperan fichar definitivamente el siguiente verano.
Mientras para el mediocampo el club confía en la consolidación de los jóvenes Frenkie de Jong, Pedri y Gavi, junto al experimentado alemán Ilkay Gundogan, el reintegrado Oriol Romeu, así como el ascenso de canteranos como Fermín López y Marc Casadó, al margen de fichajes deseados como el portugués Bernardo Silva.